Primera parte.
Por: Alfredo Colque Machicado
El 7 de junio de 2023, el Presidente Luis Arce envió a la Cámara de Diputados un proyecto de ley para actualizar los límites solidarios, subir los aportes al sistema y obligar a los trabajadores a jubilarse a los 65 años, generando desde ese momento un rechazo en varios sectores laborales, pero al mismo tiempo abriendo un debate sobre el efecto de la edad, la experiencia y la formación en la productividad laboral de los trabajadores de 65 años o más.
En ese sentido y durante estos meses me di el trabajo de investigar y realizar un análisis profundo sobre este tema, para conocer si la productividad del trabajo en Bolivia aumenta o disminuye con la edad, la experiencia y la formación de los empleados asalariados, dado los cambios que estas tres características han experimentado durante las últimas décadas.
Estoy seguro que a los responsables de las instituciones públicas en general, y sobre todo a los encargados de recursos humanos en particular, les interesarán estos datos para conocer sus efectos en la productividad laboral de las diferentes instituciones del Estado.
Para esto, nos planteamos las siguientes preguntas: ¿son los empleados de más edad más o menos productivos? ¿La experiencia de un trabajador siempre se correlaciona con una mayor productividad? ¿Son los empleados con más formación más productivos?
Este análisis se ha llevado a cabo en la Ciudad de Tarija con una muestra formada por empleados del sector público en 4 áreas como salud, educación (magisterio y universitario), policía y entidades estatales de los tres niveles de Gobierno. Los resultados sugieren que los empleados de más edad y con mayor nivel de formación son claramente más productivos que los jóvenes incluso con mayor nivel de formación académica. La experiencia también afecta positivamente a la productividad, pero lamentablemente los efectos son mucho menores. Además, los resultados difieren considerablemente según las categorías profesionales.
En resumen podemos concluir que la experiencia y la formación en la productividad de los trabajadores asalariados del sector púbico no necesariamente están relacionados a la edad, por lo tanto los estereotipos relacionados con los empleados de más edad fuera y dentro del ámbito laboral son, en su mayoría, negativos, se considera que son menos productivos, más difíciles de formar, menos flexibles y más reacios al cambio, y que sus capacidades físicas y mentales (razonamiento, memoria o velocidad, entre otras) son menores. Frente a esos estereotipos, en este análisis pudimos identificar que la productividad aumenta con la edad, ya que los empleados mayores son más estables, responsables, honestos, comprometidos, fiables y leales.
Sin embargo, debemos reconocer que existe una incongruencia reflejada en los resultados de este estudio pues por una parte se concluye que la relación entre la edad del empleado y su productividad es positiva (es decir, la productividad aumenta con la edad), pero por otra parte es negativa (la productividad disminuye con la edad). Esas diferencias de las correlaciones podrían explicarse parcialmente por la forma de medir la productividad del empleador, pero sobre todo del público al cual se deben y atienden, tema que abordaremos en la segunda parte de esta columna.
El Economista 