Militares, una carga del Estado sin sentido

Por. Alfredo Colque Machicado*

Según la CPE Art. 244, las Fuerzas Armadas tienen por misión fundamental defender y conservar la independencia, seguridad y estabilidad del Estado, su honor y la soberanía del país. La pregunta es ¿se cumple este mandato?, lamentable y contundentemente la respuesta es NO, principalmente porque la mayoría de las bases militares están acantonadas en las ciudades y no en las fronteras que se encuentran totalmente abandonadas.

Entonces, aparte de apalear a los soldados, jugar con los premilitares y no hacer más nada las 24 horas del día, de que o porque ganan sueldo los militares si NO cumplen su mandato constitucional, honestamente es una pregunta que no tiene respuesta, por esta razón a vista de todos los ciudadanos, los militares simplemente son unos parásitos bien pagados, es decir una carga del Estado sin sentido.

Esta vergonzosa realidad obliga al Gobierno Nacional a reconsiderar un giro de 360° en el rol de las fuerzas armadas, mínimamente para que esta institución del Estado justifique su abultado presupuesto público de 550 millones de dólares g/2018 (3.865 millones de bolivianos), donde el 90% es destinado a bonos especiales, sueldos y salarios, que como ya hemos explicado no se justifican para nada.

Mientras esperamos que esto suceda, que puede ser cuando el olmo de peras, proponemos al Gobierno algunas alternativas de trabajo para que los militares bolivianos se transformen en personas útiles a la sociedad ayudando a solucionar problemas que nos afectan a todos como una forma de contribuir a al pueblo al que se deben.

1.- Transferir a las Fuerzas Armadas la competencia total del control y resguardo de las cárceles públicas del país, con el objeto de fortalecer la seguridad carcelaria estableciendo programas de trabajo forzado a los internos que cumplen una sentencia judicial, este cambio permitiría mejorar la seguridad ciudadana, la defensa de la sociedad y la conservación del orden público con mayor número de policías en las calles.

2.- Creación y administración de Centros de retención y rehabilitación de adolescentes y jóvenes infractores de la ley penal, con el fin de combatir la criminalidad desde sus raíces con medidas pedagógicas específicas e imposición de conductas, aplicadas a estos menores infractores mediante programas especializados, con el objeto de reinsertarlos de manera efectiva a la sociedad.

3.- Reclutamiento obligatorio al servicio militar de personas mayores de 16 años con problemas de drogadicción y alcoholismo (mejor conocidos como parroquianos o bebedores consuetudinarios), con el objeto de implementar un programa efectivo de rehabilitación ocupacional al interior de las unidades militares, mediante actividades educativas, físicas y de trabajo permanente.

Estas, son algunas de las alternativas de trabajo para los militares bolivianos que sugerimos para transformar y redirigir el rol de las Fuerzas Armadas, que de un tiempo a esta parte se transformaron en una carga económica muy pesada para el Estado por no tener un propósito en favor del pueblo que los ve simplemente como parásitos bien pagados, es decir una carga del Estado sin sentido.

 

* Economista Máster en Economía del Gas y Petróleo

Sigue sus artículos en www.eleconomistasite.wordpress.com