GRECIA Y EL POPULISMO

Por. Alfredo Colque Machicado*

El laberinto en el cual se encuentra Grecia es el destino último de todos los populismos. No importa cuál es su ideología o tendencia política. Lo que resulta evidente es que el desenlace final es un descalabro de sus economías, empujadas por un desquicio en la administración de los recursos en las que el despilfarro y dispendio produce cierta sensación de bienestar pasajero, pero que va incubando, para más tarde vivir un estrangulamiento del que no se puede escapar.

Aunque la experiencia argentina después del default, habiéndose declarado «corralito» bancario  prueba que hay vida después de una restructuración de deuda, y después de dejar un sistema cambiario, la pregunta es a que costo?.

Nuestro país debe aprender de estas experiencias, ya que fueron varios los motivos que condujeron al país helénico a la situación actual. Los excesivos beneficios otorgados por el sistema de jubilación, por ejemplo, en el cual era posible alcanzar la calidad de jubilado a los 52 años de edad, estas políticas de corte populista son también establecidas en administraciones distintas a la de Grecia, ojo nuestro país es un mal ejemplo latinoamericano de este tipo de políticas, que más temprano que tarde tienen consecuencias. Este tipo de políticas son financiados a través de deuda que con el tiempo se vuelven insostenibles, esto sucedió con el país griego pese a que buena parte de dicha deuda les fue condonada y puede suceder con el nuestro.

En Gracia esa crisis sirvió para que los anti sistema alcanzaran el poder a inicios de este año, indicando a la población que no se someterían a los dictados del resto de países que son parte de la Unión Europea. Los electores les creyeron y ahora enfrentan la realidad que no existirá más ayuda de sus socios europeos, si no se comprometen a profundizar en algunos cambios que, para sus acreedores, aún son insuficientes.

El gobierno de Alexis Tsipras, de aceptar las condiciones sugeridas, estaría negándose a sí mismo y actuando en contra de los postulados por lo que sus votantes lo eligieron. Ofreció que no cedería a las pretensiones de la denominada Troika, pero sin la ayuda exterior difícilmente sortearía el delicado momento por el que atraviesa.

Se ha dispuesto un ‘corralito’ bancario para evitar que los ciudadanos sigan desangrando el sistema financiero, en su intento por salvar sus ahorros ante una eventual salida del euro. Ha convocado a un referéndum para decidir si la población acepta o no las medidas propuestas por los acreedores. Un gobierno que se funda en el discurso populista difícilmente puede aceptar que el rumbo emprendido es el equivocado. Peor aún si esas medidas probablemente puedan generar en un inicio mayor malestar ciudadano, con lo que estaría en duda su permanencia en el poder.

Lo sucedido era lo previsible. En eso terminan todos aquellos experimentos sostenidos en bases irreales que no sean la producción y esfuerzo de los actores económicos. Los populistas jamás aceptan sus errores, aún si constatan que sus mundos artificiales se caen a pedazos. El poner medidas correctivas les lleva a la inaceptable situación de ver desnudados sus equívocos, rendidos ante la evidencia que sus preceptos no tienen asideros reales y que su gestión, a la larga, provoca más daño que el que supuestamente pretendieron corregir. Nada nuevo bajo el sol. Solo la incertidumbre de conocer, si se persiste en el referéndum convocado, si los griegos prefieren permanecer en la zona del euro o si deciden botarlo todo por la ventana.

Siempre resulta duro despertar a la realidad y peor constatar que el que dirige el barco desde hace rato confundió el rumbo.

Y tu Bolivia hacia donde te diriges?…

 

* Economista Máster en Economía del Gas y Petróleo

Sigue sus artículos en www.eleconomistasite.wordpress.com

 

 

 

 

 

 

 

Un comentario sobre “GRECIA Y EL POPULISMO

  1. Que pena darse cuenta de esto y como ciudadano de a pie no poder hacer nada ,estan tan enceguecidos con el poder que no les importamos como Pais;y a pesar de eso nos siguen haciendo creer que vamos bien. Prueba de esto es que nuevamente estan asegurando un doble aguinaldo y llevando practicamente a la quiebra al empresariado privado que desde mi punto de vista es el que mas aporta a las arcas del Estado. Definitivamente este barco llamado Bolivia perdio el rumbo y se puso a soñar…..

    Le gusta a 1 persona

Deja un comentario