Doble aguinaldo, a que costo?

Por. Alfredo Colque Machicado*

Según el artículo 307 de la CPE es función del Estado promover políticas de distribución equitativa de la riqueza y de los recursos económicos del país, con el objeto de evitar la desigualdad, la exclusión social y económica, y erradicar la pobreza. Esta es la principal justificación legal que el Gobierno Nacional utilizó para que se pagara el Segundo Aguinaldo a los servidores públicos y trabajadores del sector público y privado, a partir del año 2013, claro siempre y cuando, el crecimiento anual del Producto Interno Bruto – PIB, supere el cuatro punto cinco por ciento (4.5%). Algo que en estos últimos diez años era posible en nuestra economía, considerando el auge de los precios internacionales del petróleo, que casualmente para el Gobierno del Presidente Evo Morales se dieron a partir de su primer año de gestión (2006), llegando incluso a superar en 2008 los 130 $us/bbl (133.88 $us/bbl petróleo WTI y 139.83 $us/bbl petróleo Brent), a un promedio de 90 $us/bbl anuales, la pregunta es ¿Por qué el Gobierno Nacional decidió distribuir la riqueza del país con los trabajadores bolivianos recién en el ocaso del auge petrolero? si el promedio de crecimiento del PIB real 2006 – 2015 fue de 5.3 %, crecimiento económico sostenido por el espejismo de una economía que tiene su base principal y única en la extracción y en la exportación de sus recursos naturales (Gas Natural).

No olvidemos que el gas natural, en los últimos 10 años, ha sido el principal producto de exportación nacional, representado 47% del total de las exportaciones del país, ingresos percibidos por la explotación de hidrocarburos que se han constituido en la principal y posiblemente mejor fuente de ingresos públicos y crecimiento económico de nuestro país.

Espejismo que no ha permitido a nuestro país pero sobre a todo sus gobernantes ver a más allá de sus narices y es que vivir bajo la dependencia de la renta que nos deja la explotación de nuestros recursos naturales, principalmente el gas natural, no podía durar para siempre y ahora que hemos despertado de esta falsa ilusión de vivir en el país de las maravillas gracias a la caída internacional de los precios del petróleo, nos damos cuenta que algunas cosas no podían sostenerse y que en algún momento tenían que desaparecer como los cuentos del vendedor de humo, pero echarle la culpa a los fenómenos climáticos, como «El Niño», «La Niña» o a la oposición política, para no pagar este año el Doble Aguinaldo es como pretender esconder y al mismo tiempo reconocer el fracaso en política económica.

Ahora tratar de sostener lo insostenible, es como pedir peras al olmo, es imposible, es demagogia, aunque sabemos que la política es el arte de lo posible, y para los políticos bolivianos que están acostumbrados a prometer el cielo y la tierra, sobre todo cuando están en campaña no será difícil y para ellos disfrazar nuestra economía no será nada imposible, pese a la caída de los precios internacionales del petróleo ¿pero a que costo?.

El segundo aguinaldo dispuesto para la gestión 2016, pone en riesgo las obras sociales sin fines de lucro que atienden a niños,  discapacitados, ancianos, obras en salud y educación, además de protección social y el Gobierno lo sabe, pero no quieren reconocerlo.

Sin embargo hay algo que debemos separar, y es que el crecimiento de nuestra economía no solamente se debe a la participación del estado, sino también al privado, que es fundamental a la hora de medir el PIB, pues bien el sector privado generó utilidades netas solo en los últimos tres años (2013 – 2015) por Bs 23.000 millones, por tanto es lógico y justo que si hay ganancias en las empresas privadas, estas deben ser redistribuidas a los sectores que lo generan, es decir a los trabajadores, por tanto los empresarios privados están obligados primero a cumplir la ley, aunque en honor a la verdad muchas empresas privadas no lo hacen y no pagan el doble aguinaldo, chantajeando a sus trabajadores con el pretexto de que si pagan ese beneficio tendrán que despedirlos y por no perder su fuente de trabajo, muchos trabajadores aceptan ese condicionamiento del empresario, como quien dice hecha la ley, hecha la trampa y así este beneficio para una gran mayoría de los trabajadores del sector privado se convierte simplemente en un espejismo y  ante  la ausencia del Estado y la poca representatividad de la entidad laboral, los trabajadores prefieren renunciar a sus derechos laborales que perder su empleo.

En conclusión debemos señalar que si bien nuestro país ha experimentado un crecimiento sostenido de su economía por lo menos en los últimos años y de la cual el empresariado privado ha sido el más beneficiado, este ya es parte del pasado y lo que vivíamos no era más que un espejismo, lamentablemente porque no supimos aprovechar los años de bonanza para sembrar desarrollo, hoy nos toca lamentarnos y a los políticos ocultar la realidad.

Estoy seguro que este año se pagará el Doble Aguinaldo, pero espero que por el bien de nuestra economía no lo haga, si lo hace reitero mi pregunta, a que costo?.

 

* Economista Máster en Economía del Gas y Petróleo

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2 comentarios sobre “Doble aguinaldo, a que costo?

  1. Gracias, el interrogante que planteas, es fácil de comprender, o darse cuenta, que el único propósito de emitir este decreto fue POLÍTICO, ya que los únicos que se benefician directamente son los funcionarios públicos, y se frena las iniciativas micro empresariales, ya que los pequeños empresarios son honestos y fáciles de someter a la Ley Gral. del trabajo, al margen de esa situación, no existe un mecanismo real de transparentar las finanzas de las grandes empresas, especialmente en el oriente. y no creo que se pague el 2do aguinaldo, se manipulara los datos del INE, y listo, quien dira algo, no hay fuerza social que se pueda movilizar a estas alturas, y peor con las experiencias de las ultimas movilizaciones de los cooperativistas, y los tienen a los empresarios de su lado…

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