El extraño fenómeno de los socios de COSETT

Por. Alfredo Colque Machicado*

Estoy casi seguro que, si se realiza algún estudio sociológico para demostrar la existencia de un raro fenómeno en los socios de COSETT, este demostraría que son personas en su gran mayoría con una tipología que desafía todas las leyes del entendimiento y la lógica humana. Pues casi todos son personas de clase media-baja, trabajadores por cuenta propia, o asalariados de toda la vida y con sueldos de miseria, que en época electoral votan insistentemente por los mismos sinvergüenzas de siempre, aunque debemos reconocer que este fenómeno se da en cualquier acto eleccionario, pero también y sobre todo en la actividad político partidaria.

Sin embargo no hay que confundir a los oportunistas, (gente que vota por los mismos sinvergüenzas para defender sus propios intereses, me refiero a aquellos que cambian de partido político, como pañales a un recién nacido, después de cada cagada), con aquellos que son escaleras (que también votan por los mismos sinvergüenzas, pero nadie entiende el por qué, ni siquiera ellos mismos). Los llamados escaleras o tontos útiles son un grupo mayoritario de la sociedad, pero muy mimetizado aunque a  simple vista pasan desapercibidos. Pero con un poco de atención e incentivo (dadivas y promesas electorales) son fácilmente identificables, es decir sobornables.

Para no entrar en un mundo tan grande y obscuro como la política partidaria, analizaremos este fenómeno en el caso específico de COSETT, ya que ante cualquier pregunta sobre la situación de la cooperativa, la gran mayoría de los socios responderían que no conocen lo que sucede en su cooperativa, o que no les interesa, pero curiosamente cuando hay elecciones votan por los mismos sinvergüenzas de siempre (lo que confirma la premisa de que, efectivamente, no conocen lo que sucede en su cooperativa y que obviamente no les interesa).

Si les preguntas qué opinan sobre los casos de corrupción de COSETT, la mayoría de los socios responderán que todos los que entran a la cooperativa son iguales. Por el contrario, la respuesta será muy diferente si el que entra es del mismo grupo corrupto de siempre, dirán más vale malo conocido que bueno por conocer.

Si les preguntamos sobre el paro y la situación laboral de los trabajadores de COSETT no tardarán mucho en sacar el recurrente tema de los jugosos sueldos que estos inmerecidamente perciben, aunque no estaría demás decirlo, están mucho mejor que la mayoría de nosotros que la pasamos realmente peor y que nos encontramos en una situación bastante desfavorecida.

Si después de estas preguntas, notamos una cierta incomodidad, es normal, hay que tomar en cuenta que la mayoría de los socios de COSETT son de la teoría de que en esta vida más vale no identificarse aunque los problemas sean de uno mismo.

Pero a qué se debe este extraño comportamiento de no me importismo y qué causas son las que lo provocan?. Personalmente creo que hay dos fenómenos que pueden explicar esto.

LA CATARSIS DEL ATA HUATOS: Fenómeno psicológico por el cual, personas de la clase media-baja con recursos económicos limitados, acaban pensando que si están con los que tienen el poder y el dinero algo acabará pegándose. Y a pesar de que jamás ven el más mínimo resultado a lo largo de toda su vida, continúan apoyando a los mismos sinvergüenzas de siempre, es decir a los corruptos y delincuentes.

LA CATARSIS DEL DESGRACIADO: Este desviamiento psíquico está inversamente relacionado con el anterior y por el mismo proceso mental por el que piensan que la riqueza se puede pegar, también creen que la pobreza se puede contagiar. Es por este motivo que estos sujetos desarrollan una enfermiza animadversión hacia aquellas personas que todavía son más pobres que ellos, como marginados, inmigrantes, etc.

De la convivencia de estas dos catarsis en la psique de estos sujetos se derivan actitudes como las de despreciar la enseñanza pública y querer llevar a sus hijos a colegios privados. Y por si esto fuera poco, también padecen EL SÍNDROME DE ESTOCOLMO, ya que se encuentran mejor si apoyan a aquellos que tan pronto como puedan, y gracias a sus votos, recortarán sus derechos, endurecerán sus condiciones laborales, y les joderán todo lo que puedan. Ellos felices y contentos.

Así que mientras menos nos involucremos en los problemas de nuestra cooperativa y no dejemos de lado él no me importismo, podemos estar agradecidos a los oportunistas y escaleras (que posiblemente seas tú o tú, o tú, o tal vez tú), que cada que hay elecciones  le das los votos nuevamente a estos ladrones y miserables.

Yo no soy un ata huatos, tampoco un desgraciado, por eso he decidido cambiar el extraño fenómeno de los socios de COSETT y colocarme del lado de aquellos que se interesan por los problemas de nuestra cooperativa e intentar hacer algo y comenzaré no eligiendo a los mismos sinvergüenzas de siempre.

 

* Economista Máster en Economía del Gas y Petróleo

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