Inseguridad, eterna inseguridad ciudadana

Por. Alfredo Colque Machicado*

Acaba de inaugurarse una moderna infraestructura para la Unidad de Transito de la Policía Nacional acantonada en Tarija Kapital, sin embargo como sabemos no es el único edificio que se ha construido para nuestra policía, recordemos que solo en la cuidad de Tarija se han construido 5 EPIs (Estación Policial Integral), que atienden en diferentes zonas de nuestra ciudad (Barrio Senac, B. Los Chapacos, B. Moto Méndez, B, Morros Blancos y B. Lourdes), además de la inauguración de este edificio el evento sirvió para equipar a la Policía Nacional de nuestro Departamento, como casi todo los años lo hacen las autoridades de los tres niveles de Gobierno, con mobiliario moderno como computadoras, equipos de oficina, camionetas, vagonetas, motocicletas, equipo anti motines, etc.

Sin embargo pese a todo este equipamiento que durante años se le ha dado a la Policía Nacional de nuestro Departamento, que a propósito nunca hacen mantenimiento, hay una sensación generalizada de inseguridad de la población tarijeña, inseguridad ciudadana que se campea por todas partes, debido fundamentalmente a la falta de policías en las calles, tanto que parece que la única solución para los ciudadanos sería hacer justicia por propias manos ante tanta delincuencia, sin embargo la inseguridad ciudadana que acecha a la población tarijeña en todo el territorio departamental, no se debe sólo a la falta de policías en las calles, sino a la falta de una política estructurada y participativa de Seguridad Ciudadana, que estructure una reingeniería en la Policía Nacional de nuestro Departamento, tarea que está bajo responsabilidad del Consejo Departamental de Seguridad Ciudadana.

Pero no me refiero a enmiendas simplistas, como exigir el retorno de los brigadistas barriales, que más que una solución eran un verdadero problema, tampoco pasa el problema por pedir la renuncia del Comandante de la Policía Departamental, como respuesta a un capricho personal, que algún desubicado por ahí tiene, tampoco creamos que la tan esperada, pero eternamente postergada instalación de cámaras de vigilancia, por si solas van a reducir la inseguridad ciudadana, peor aún las alarmas vecinales, (silbatos barriales), estos proyectos son una ayuda, pero no la solución, la realidad del problema es más compleja.

Algo que nos puede ayudar a entender de fondo este complejo problema, podría ser el desempleo y es que la falta de empleo en Tarija está pasando factura, no quiero hacer entender que este sea el principal problema, pero en nuestro Departamento nunca hubo índices tan altos de desempleo como ahora y al momento de analizar este tema habría que considerar este fenómeno ya que parece que el origen del crecimiento de la delincuencia innegablemente no sería otro que la pobreza y sus consecuencias que se convierten en delitos. Otro elemento fundamental de este problema de inseguridad ciudadana es la descoordinación evidente que existe entre la policía y los operadores de justicia, esto debido a que los delincuentes prontuariados y reincidentes que son atrapados por la Policía, son soltados por jueces benévolos a las pocas horas de su detención, hace falta sanciones más severas y no solo para los delincuentes, sino también para aquellos que ayudan a los delincuentes.

Otro problema fundamental es que tenemos una Policía mal organizada, es inconcebible que haya más policías de escritorio y levanta conos en las instituciones públicas y privadas (entidades financieras), que policías en las calles en favor de la seguridad ciudadana, es hora de que estas instituciones públicas y privadas contraten personal de seguridad de empresas privadas y dejen que la policía dé cumplimiento efectivo a su mandato constitucional (Artículo 251 indica que la Policía Boliviana, como fuerza pública, tiene la misión específica de la defensa de la sociedad y la conservación del orden público y el cumplimiento de las leyes en todo el territorio boliviano), otro problema evidente del verde olivo son los malos efectivos de todo rango, no quiero decir que la policía está llena de manzanas podridas, pero por unos cuantos malos efectivos corruptos y abusivos, toda la institución policial es mal vista, hoy en día por este inconveniente es casi imposible recomendar a nuestro hijos que ante cualquier problema de inseguridad se acerquen a un efectivo policial a buscar seguridad, ya que por la mal conducta de algunos efectivos se ha puesto en duda con quien el ciudadano estará más indefenso, si con el delincuente o el policía.

En conclusión considero que la inseguridad ciudadana al ser un problema sumamente complejo merece por parte de todas sus todas sus autoridades repensar con urgencia en soluciones efectivas y programas de beneficio colectivo, traducidos en una disminución del desempleo y en la creación de oportunidades de trabajo para contrarrestar la delincuencia, la inseguridad ciudadana y la inseguridad institucional, además de la urgente restructuración de la Policía Nacional en el Departamento de Tarija y terminar con la inseguridad, eterna inseguridad ciudadana.

 

* Economista Máster en Economía del Gas y Petróleo

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