¿Juramento hipocrático o hipócrita?

Por. Alfredo Colque Machicado*

El juramento hipocrático es un juramento público que hacen las personas que se gradúan en medicina. Su contenido es de carácter ético, para orientar la práctica profesional de su oficio. Es también un juramento que se basa a partir de la responsabilidad del ser humano y la conciencia de ella.

No olvidemos que el médico, a diferencia de otros profesionales, lleva sobre sus hombros la gran responsabilidad directa de decidir a diario frente a situaciones trascendentales como, la salud, la enfermedad, el dolor, la vida, e incluso la muerte. Es algo que no puede eludir, y es inherente a su actividad profesional.

Frente a la decisión, el médico puede dudar, pero no puede eludir tomar una decisión. Su primera responsabilidad, es mantenerse alerta y actualizado, como también sujetarse a normas éticas y morales fundamentales en su relación con el enfermo, el necesitado y su entorno.

Lamentablemente hoy en día, ante tantos casos de negligencia médica, pareciera que el médico (no me refiero a todos), ha olvidado ese compromiso público, olvidando por completo los preceptos de su juramento, una tradición médica que se ha perdido en el tiempo, como se perdieron los valores que encierran a esta digna profesión, como el respeto a la vida y la dignidad del hombre, como también la gratitud, la compasión, la justicia, la honestidad, la humildad, la santidad, la integridad y la confidencialidad.

Es cierto que los médicos cuando atienden a un enfermo no van a matar ni a causar lesiones con premeditación y alevosía, como lo hace un vil criminal cuando quiere arrebatar a su víctima de sus pertenencias, pero desde que el médico ha mercantilizado su profesión repartiendo su tiempo en la mañana de la clínica privada, al hospital público y en la tarde de otra clínica privada a otro hospital público, para ganar más, atendiendo menos, es casi lo mismo, pues el interés de usura de algunos médicos, arrebata a los enfermos la posibilidad no solo de una buena atención médica, sino también de recuperar la salud y hasta de salvar su vida.

Ciertamente que hay muchos médicos honorables, capaces y que cumplen al pie de la letra con el juramento hipocrático, sin embargo cada día está más presente en los hospitales públicos y clínicas privadas la falta de humanidad de muchos médicos, que llegan al extremo de indicar procedimientos equivocados a sus pacientes, con el agravante de que la gente de escasos recursos no tiene capacidad para discernir, ni la posibilidad de tener una segunda opinión.

 

Sin embargo la negligencia médica es un hecho presente y difícil de ocultar (como pretenden algunos médicos), ante este problema, algunas personas han sugerido ilógicamente una Ley contra la negligencia médica, para castigar desde mi punto de vista un concepto muy subjetivo como es la negligencia, cuyos resultados no siempre dependen de un solo actor, sino de un grupo de personas, instituciones, equipamiento, instrumental, tiempo de trabajo del médico, etc. La atención de un paciente depende de muchos factores: depende del grado de lesión, depende de la rapidez con que es trasladado a un centro de salud adecuado para ser atendido (no todos los centros de salud están equipados para dar buena atención a sus pacientes la mayoría carecen de las más elementales condiciones para tratar a los enfermos), no se cuenta con personal médico permanente en los centros médicos de salud públicos, no existe un sistema de comunicación rápido y eficiente, no se cuenta con un sistema de transporte como son helicópteros-ambulancias, Unidades de Terapia Intensiva Ambulatoria y personal médico en las ambulancias con entrenamiento de este nivel de medicina, que lleguen al lugar de los hechos en el menor tiempo posible.

Algo que también debemos reconocer es que el sistema de salud boliviano tiene muchas falencias que los diferentes gobiernos no han tenido el valor de afrontar y resolver, como la falta de un sistema de rescate y transporte a los centros de salud, la falta de equipamiento con tomógrafos y resonancia magnética, la falta de instrumental quirúrgico acorde a los tiempos modernos en que se encuentra la medicina mundial, por tanto antes de pensar en una ley para penalizar lo subjetivo se debe pensar en generar mejores condiciones para los médicos y los centros médicos de salud del país.

Además una solución que considero podría ser efectiva para evitar la negligencia médica es la re-organización de los centros de salud en coordinación con centros privados, para que los médicos especialistas existentes en el medio sean distribuidos adecuadamente, de manera tal que no existan especialistas que trabajan al mismo tiempo en un hospital público, en una caja de salud, y en la mayoría de las clínicas privadas, es decir hacer una reingeniería del sistema de salud para luego, analizar sanciones como el caso de la negligencia médica.

En conclusión, la negligencia médica está presente, pero es un problema posible de solucionarlo, la misma no pasa solamente por crear o cambiar leyes, construir, mejorar y equipar los centros médicos de salud o reorganizar el sistema nacional de salud pública y privada, la solución efectiva pasa porque el profesional médico recuerde que la salud de los pacientes es su primer objetivo, que en sus manos se encuentra la salud, la enfermedad, el dolor, la vida, e incluso la muerte.

 

* Economista Máster en Economía del Gas y Petróleo

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